
Para la actividad propuesta he seleccionado una pintura al óleo y acrílico que terminé en 2012 con una acción performativa (vertido de la pintura blanca que conforma el fondo) en la antigua cárcel de A Coruña, durante unas jornadas artísticas realizadas para poner en valor el edificio abandonado. En dichas jornadas nos dimos cita numerosos artistas locales situando nuestras obras en celdas y pasillos del abandonado edificio.
Esta pintura sobre lienzo, “Autorretrato frida”, de 194x114cms consta de dos mitades de mi cuerpo pintadas en los laterales del lienzo, paralelas. Figuras erguidas, muy rectas, ambas vestidas con una bata blanca de pintar; la única diferencia es que una está desnuda y la otra lleva ropa. Todo el fondo es también un primer plano de pintura blanca craquelada, agrietada como tierra sin agua, que ocupa las paletas de pintura que ambas mitades sostienen -curiosamente tanto en la mano izquierda como en la derecha-, aludiendo a la auto representación a partir del espejo.
Cuando un espectador observa este autorretrato lo primero que me suelen decir, con acierto, es que les recuerda a Frida Kahlo, a Las dos Fridas, 1939. Una referencia artística que ha marcado mi pintura, sobre todo, en los primeros años. En el cuadro de Kahlo se representa la dualidad del sujeto y la conexión vital a través de la sangre, la unión y dependencia de esa oposición (que se manifiesta en dos formas de vestir; la tehuana y la occidental) que puede ser confrontación o convivencia. En mi autorretrato las dos mujeres aparecen conectadas, sustituyendo la sangre por la pintura y presenta una oposición en la vestimenta frente a la desnudez.
2.Desnudez y honestidad.
La persona que desea expresar y crear se expone frente a los demás, para ello ha de tener antes claridad acerca de su interior, aunque sea la certeza del caos, del propio desorden. Por eso The artist is present, 2010 es el segundo de los autorretratos que pongo en relación a este. Citando a Marina Abramovic: “El artista es un ser muy complejo y desgarrado en su interior por contradicciones. El acto creativo es como dar a luz, un proceso en muchos casos muy doloroso y a veces destructivo. En mi caso, y sin pretender generalizar, he de comprender mis propias contradicciones y encontrar un cierto equilibrio en ellas. Sólo puedo conseguirlo con un estado mental puro, por eso los talleres de Cleaning the House funcionan como preparación para el acto creativo”. Abramovic, Marina (2003) .“Marina Abramovic. Student body” Centro Galego de Arte Contemporánea. pp.38-39
En esta performance Abramovic se sitúa sentada mirando al frente donde, en una silla se van sentando diferentes personas con las que establece contacto visual. Ella parece una pintura en la que todas nos queremos mirar para descubrir en su interior la fortaleza y el sentido del ser.
La desnudez de una de las mitades hace alusión a la honestidad necesaria para crear desde la verdad de la autora, para poder crear alineada con valores y sentimientos propios y también para poder afrontar esta exposición y la vulnerabilidad que eso conlleva. Al ser mujer la idea del desnudo femenino me trae a la mente todas esas pinturas en las que el cuerpo de las modelos se ofrece al espectador como objeto, en muchas ocasiones objeto cargado de sensualidad y vaciado de humanidad. Por ello traigo aquí el Autorretrato con collar de ámbar, 1906, de Paula Modersohn-Becker cuya pintura nos ofrece una representación del cuerpo femenino sólida, un poco primitiva y hermosa, nada alineada con una sensualidad cómplice del espectador masculino.
Citando a la pintora, grabadora y escritora Paula Bonet “Antes de mirar hacia afuera, hacia el lugar que queremos ocupar con libertad, hacemos el ejercicio de mirar hacia adentro, de intentar averiguar quiénes somos. Se trata de un ejercicio complejo, es mucho más fácil saber quién se quiere ser. O quién se quiere que se sea.”Bonet, Paula(2022) “Los diarios de la anguila” Ed Anagrama pp.335
El arte y la creación van cambiando en relación a las tecnologías e intereses humanos, igual que en relación al sistema socio-económico en el que los artistas se encuentran inmersos. Actualmente el mercado del arte determina el éxito de unos artistas frente a otros y a la hora de dar visibilidad a sus creaciones no es ajeno a estereotipos y desigualdades en relación al género, racialización, nacionalidad, actividad artesanal o técnicas utilizadas.
3. La paleta en la mano.
3.1. El oficio. Comparto de el texto compuesto a partir de varias conferencias de Oscar Wilde, impartidas a finales del siglo XIX en Estados Unidos como líder del Movimiento Artes y Oficios, la siguiente cita: “El nuestro ha sido el primer movimiento (Arts and Crafts) que ha aunado a artesanos y artistas, pues recordad que separando el uno del otro arruinareis a ambos, a uno le robáis todo motivo espiritual y todo el deleite imaginativo, al otro le aisláis de la verdadera perfección técnica. Las dos más grandes escuelas del arte en el mundo, la de escultura de Atenas y la de pintura de Venecia, tienen todo su origen en una larga sucesión de sencillos y honestos artesanos” Wilde, Oscar (2010) “Las artes y el artesano” Gadir Editorial, en la que reivindica el trabajo físico y técnico como un componente de la creación y también recupera el valor artístico de la llamada artesanía. Así mismo, vemos en el texto de Raymon Thomas «La perfección técnica» como en las artes orientales de inspiración Zen, el camino a la perfección técnica (manual) es en si mismo una definición de arte, un acercamiento a la espiritualidad, expresión original y belleza.
La paleta en la mano en el Autorretrato frida tiene que ver con mi necesidad de pintar, de búsqueda y exploración técnica que se vincula estrechamente con el resultado y con el proceso, un proceso pictórico/matérico que modifica los posibles finales a través de lo espontáneo y accidental. Entiendo así que tanto la idea, la creación, como la materialización de ésta pueden ser trabajo del artista si así lo necesita.
3.2. Género. Como mujer hay una parte importante en hacer visible mi labor como pintora y también como maestra es por ello que aparezco con la paleta en ambas manos. Las dos manos son receptoras de la pintura, una pintura que lo abarca todo y se sitúa en el mismo plano de la paleta que en la parte de atrás de las figuras, es un todo blanco.
Quiero mencionar las obras de algunas de las muchas pintoras que se auto retrataron en el acto de pintar, con una paleta en la mano, ante la necesidad de visibilizar y ser parte de una profesión, que en muchas ocasiones les restringía el acceso por ser mujer.
De Artemisia Gentileschi El autorretrato como alegoría de la pintura, 1637, obra en la que la imagen de la pintora ocupa toda la diagonal del cuadro en actitud de pleno trabajo pictórico, con un fondo indeterminado y oscuro, donde el interés se centra en ella y la actividad que realiza que parece darle luz. De Judith Leyster, el El Autorretrato de 1633 en el que aparece vestida con ropas elegantes (complicadas para pintar) y una actitud alegre y relajada. Ambas pintoras se enmarcan en el período Barroco, una en Italia y la otra en Holanda, y muestran en estos retratos su talento, prestigio y estatus social.
En Francia, en el siglo XVIII la Academia de pintores y escultores ( Académie Royale de Peinture et Sculpture fundada en 1648 por Luis XIV) imponía normas estrictas a la actividad artística. Generando una estructura jerárquica que controlaba el acceso a formación, temas o la exhibición de las obras realizadas. Entre las pintoras que consiguieron un lugar como profesionales de la Academia a pesar de las dificultades de género, he seleccionado el Autorretrato con dos estudiantes, 1785, de Adélaïde Labille-Guiard, ella se pinta muy elegantemente vestida acompañada de dos estudiantes y una gran paleta y pinceles casi en el centro del cuadro. Este retrato me parece importante porque se hace acompañar de sus alumnas mostrándose como artista pero también como formadora y consciente de la importancia de ser referente para otras mujeres. Y, selecciono el Autorretrato de 1790 de Elisabeth L. Vigée Le Brun en el que aparece vestida de forma más sencilla que en otros de sus autorretratos, en el acto de pintar la figura de la reina, con una mirada directa y honesta al espectador y una sonrisa que, al parecer en aquel entonces no se contemplaba en la ortodoxia académica al dejar entrever los dientes. En este texto: “I have portrayed myself with palette in hand, before a canvas on which I am drawing the queen in white chalk.” The painter had conceived the painting as a double portrait in homage to her queen, Marie Antoinette, thus demonstrating her loyalty to the ancien régime, which had protected and valued her. Facing the viewer Elisabeth sports the amiable, engaging smile that had characterised her previous self-portraits. The elegant black silk robe she wears, a reference to the officialdom of her rank, is brightened by the saturated red of the sash that cinches her waist. On her brown curls she wears a white cloth turban reminiscent of the headdresses used by Rembrandt in numerous self-portraits. The result is a fresh and lively image, which enhances the gentle beauty of the woman, also declaring her talent as an artist.” “Le Gallerie degli Uffizi”, https://www.uffizi.it/en/artworks/self-portrait_vigee_le_brun podemos ver en esta cita la importancia que tiene para la artista la pertenencia a la Academia, el hecho de pintar a la reina y su estatus social que está en relación con la profesión liberal del arte. También vemos como se vuelve a unir y mencionar en la cita la belleza de Le Brun junto al talento; es difícil plantear su maestría sin más, ocupándose del ámbito artístico y olvidar los estereotipos de género.
4. Ropa y clase.
En mi autorretrato una de las mitades de la pintora aparece vestida, la elección de la ropa no es casual. Tanto la bata blanca que uso toda la semana en clases y pintando y que es tan solo un mandilón que protege de las manchas de la pintura como los pantalones, camiseta negra y zapatos que se ven en la pintura son mis ropas de trabajo, también ropas que uso frecuentemente para caminar por el barrio y hacer la vida cotidiana. El pelo recogido elimina cualquier signo de coquetería e incluso puede parecer masculino. El modelado de los cuerpos es un poco primitivo y las arrugas se resuelven de forma simplificada, igual que la paleta de color es austera.
En este apartado sumo un Autorretrato de 1923 de Romaine Brooks del que Whitney Chadwick dice “En su Autorretrato de 1923, se muestra a sí misma en una actitud rígidamente contenida ante un fondo de edificios en ruinas. El rostro presenta el aspecto de una máscara, con los ojos bajo la sombra del ala de una chistera y una mano enguantada contraída ante el cuerpo. Tiene una mirada vigilante, y la vestimenta es elegante pero austera. Combinando las temáticas de la fortaleza e independencia romántica, y los signos indumentarios de la riqueza y la independencia, Romaine Brooks produce una vigorosa imagen femenina.” Chadwick, Whitney(1999). “Women, Art and Society” Ediciones Destino pp. 301. La imagen de Brooks con un aire masculino en relación a los anteriores retratos que he mencionado, quizás está reivindicando mayor autonomía y ocupar ese espacio masculino de acceso a todas las posibilidades en la vida pública . O quizás nos habla de una mujer que se siente cómoda en el género masculino. Lo que quiero traer aquí, con este ejemplo de Brooks, es la importancia de la indumentaria elegida en el cuadro, que en mi autorretrato se refiere al derecho al acceso a las artes para las personas que hemos crecido en una situación de vulnerabilidad económica, de clase social trabajadora. Al igual que el artista hoy en día es referente cultural en su comunidad y también es parte de esta comunidad, en mi caso un barrio periférico y obrero en el que compartir experiencias vinculadas desde las artes.
5. El blanco. La carne, la muerte y múltiples respuestas.
El blanco es el fondo y el fondo es toda la pintura blanca que, en la cárcel se vertió a lo largo del lienzo. El blanco carente de cromatismo es el inicio sobre un papel, un lienzo imprimado de gesso y es el final porque una vez acabado un trabajo se vuelve al blanco, al principio de otro. Creo que en el autorretrato de todos los artistas hay una mirada al yo cambiante ( Durero, Rembrandt, Van Gogh, Kahlo, Mendieta), más allá del paso del tiempo -sobre la carne y la propia mortalidad- están los cambios en el yo, en la profundidad del ser y su mutabilidad. En palabras de Francis Bacon aunque detestes tu rostro hay una pulsión por explorar tu mirada: “Detesto mi propia cara pero sigo pintándola solo porque no dispongo de otras personas a quienes pintar. No hay duda de que…una de las cosas más bellas que dijo Cocteau es: todos los días veo en el espejo trabajar a la muerte’ . A todos nos pasa.” Sylvester, David (2003)“Entrevista con Francis Bacon” Random House Mondadori p.113-114
Quiero mencionar también el autorretrato de Amy Cutler, Army of Me, 2003 en el que la multiplicidad de Amys se convierte en un ejército confrontado con una gran figura de Amy en un diálogo del que no tenemos palabras, si un fondo completamente blanco. El blanco también es una posibilidad abierta a múltiples escenarios que abrirían cada uno sus propias preguntas. Igual que a la pregunta que se plantea: ¿quién es artista y qué significa? Se abren múltiples y cambiantes respuestas sobre el lienzo.
Referencias
-Thomas, Raymon.(1986). «VII – La perfección técnica». Sabi-wabi-zen : el zen y las artes japonesas. Edicomunicación.
-Campás Montaner, (Joan). (s/a). El artista a lo largo de la Historia. (Recurso de Aprendizaje Textual). Universitat Oberta de Catalunya
-Chadwick, Whitney(1999). “Women, Art and Society” Ediciones Destino
-Sylvester, David (2003) “Entrevista con Francis Bacon” Random House Mondadori
-Wilde, Oscar (2010) “Las artes y el artesano” Gadir Editorial
-Abramovic, Marina (2003). “Marina Abramovic. Student body”. Centro Galego de Arte Contemporánea.
-Bonet, Paula(2022) “Los diarios de la anguila”. Editorial Anagrama
-EXIT BOOK. Feminismo y arte de género. Nº9.2008
-The Met. Metropolitan Museum https://www.metmuseum.org/art/collection/search/656845
-Pili Egea. Las dos Fridas 1939 .“Museo de Arte Moderno de México”
https://historia-arte.com/obras/las-dos-fridas
-Secretaría de Cultura. INBAL
https://inba.gob.mx/actividad/8839/explicacion-del-cuadro-las-dos-fridas-de-frida-kahlo
-Le Gallerie degli Uffizi
https://www.uffizi.it/en/artworks/self-portrait_vigee_le_brun
Autorretratos comparados con el autorretrato de la autora:
1. Frida kahlo, Las dos Fridas, 1939
2.Marina Abramovic, The artist is present, 2010
3. Paula Modersohn-Becker, Autorretrato con collar de ámbar, 1906
4.Artemisia Gentileschi, Autorretrato como alegoría de la pintura, 1637
5.Judith Leyster, Autorretrato 1633
6. Adélaïde Labille-Guiard, Autorretrato con dos estudiantes, 1785
7. Elisabeth L Vigée Le Brun, Autorretrato, 1790
8. Romaine Brooks, Autorretrato 1923
9.Amy Cutler, Army of me, 2003